Aceite de oliva Cornicabra: Una variedad saludable de zumo de aceitunas
Cuando analizamos detenidamente todas las variedades de aceitunas que existen para producir aceite, nos quedamos atónitos con ello, pues cada tipo de aceite se comercializa de acuerdo a los gustos del consumidor. Y el aceite de oliva cornicabra no es una excepción.
Y aunque no todas las marcas lo distribuyan, se trata de una variedad que vale la pena aprovechar dado su alto contenido de ácido oleico, supliendo a la perfección las necesidades que tengan los consumidores con aceites similares, como por ejemplo, el aceite picual.
Es innegable el hecho que la variedad cornicabra ha adquirido relevancia con el tiempo, siendo de las principales aceitunas que se producen en España, ocupando el tercer lugar en volumen de producción y el segundo lugar en hectáreas cultivadas.
Si eres de aquellos que les place consumir a menudo este zumo de aceitunas, es importante que conozcas ciertos aspectos adicionales y te conviertas en un consumado amante del aceite de oliva.
Aspectos fundamentales del olivo cornicabra
La presencia del olivo cornicabra data de hace mucho tiempo; se caracteriza por adaptarse a zonas específicas del terreno de cultivo y por tener un enraizamiento sin precedentes. Es resistente a las heladas y sequías, además de ser adaptable a los suelos pobres.
Es una especie que proviene de la zona de los Montes de Toledo, en la zona central de España, ya que este lugar proporciona las condiciones que requiere este olivo para reproducirse. El cultivo de esta variedad se ha expandido hacia Toledo, Madrid, Ciudad Real y algunos sectores de Extremadura.
Es un olivo que cuenta con un vigor medio, densidad espesa en la copa del árbol, brotes escasos y tonos ocres que se hacen evidentes en la madera temprana. Todas estas características hacen del olivo cornicabra un buen candidato para tener garantizada la producción del mismo.
Otro de los aspectos que salta a la vista de este árbol es la forma de sus hojas, que son alargadas y simétricas de color verde claro en la parte visible, mientras que el envés es de color gris verdoso.
Ahora bien, en el caso del fruto, la aceituna cornicabra destaca por su maduración tardía que inicia a finales de octubre y se prolonga hasta finales de enero. Al igual que la oliva hojiblanca, es resistente al desprendimiento, siendo necesario emplear técnicas especiales para su recolección.
Lamentablemente esta variedad de aceitunas es susceptible de padecer tuberculosis y brotes de moscas.
Pero lo que definitivamente debes saber de la aceituna cornicabra es que su nombre deriva del hecho que es similar a un cuerno: alargada, terminando en punta y asimétrica. Tiene un peso medio, pero un elevado rendimiento graso.
Características del aceite de oliva cornicabra
El aceite de oliva cornicabra destaca por su alta estabilidad y por la calidad de la pulpa de su aceituna, lo que hace posible que se pueda extraer un aceite de inigualables características organolépticas.
Es un aceite de matices frutados y frescos, de color amarillo oro con matices verdes similares a los de las tomateras, lo que indica la presencia de los polifenoles. Cuenta con un sabor amargo y dulce a la vez que se percibe al final de la degustación.
Su sabor recuerda continuamente al del aguacate y otros productos obtenidos de la huerta, sobre todo si se produce zumo de aceitunas cosechadas durante el mes de enero. También tiene un picor de intensidad media, además de una textura aterciopelada.
En cuanto a la estabilidad del aceite de oliva cornicabra, se debe principalmente a su composición que consta de ácidos grasos esenciales, el infaltable ácido oleico que se estima entre el 77 y 79%, y otras sustancias que son responsables de los olores y sabores de este aceite.
La composición de los aceites cornicabra pueda que varíe entre un año y otro, así como también en función de lo que se produzca en una cooperativa y otra, ya que se trata de una especie susceptible a los cambios del clima y al medio agronómico donde se plantan los olivos.
A favor del consumo de aceite cornicabra
Los aceites de oliva virgen extra en su mayoría tienen cierto contenido de polifenoles, los cuales son sustancias antioxidantes de origen natural. El aceite de oliva cornicabra tiene una numerosa variedad de estos polifenoles, que incluso otras grasas no contienen.
Se recomienda su consumo en personas que sufran de enfermedades cardíacas, neurodegenerativas o cáncer. Los polifenoles del aceite de oliva, pese a ser absorbidos rápidamente por el cuerpo, se expulsan de la misma manera, por lo que debe adoptarse su consumo diario.
Dejando a un lado un momento las aplicaciones medicinales, no podíamos omitir lo bien que queda el aceite cornicabra en muchas comidas, pues su sabor hace posible que se pueda incluir en numerosas recetas.
Bien sean los pescados, las tostadas del desayuno o las ensaladas, quedan excelentemente adornadas y aderezadas con el aceite cornicabra. Incluso muchas conservas quedan geniales con un toque de este aceite, haciendo que su sabor sea simplemente delicioso.
De manera similar al aceite arbequina, es una grasa que se emplea en la preparación de postres, todo gracias al delicado sabor que posee y a su adaptabilidad.
¿Estás dispuesto a consumir este aceite de oliva?
El ser humano busca prolongar su estancia en la tierra por medio del incremento de su calidad de vida, y el consumo de aceites de oliva virgen extra hace esto posible.
Múltiples estudios han demostrado que el aceite de oliva cornicabra es uno de los aceites más beneficiosos, el cual se encuentra en franca competencia con la variedad picual, aunque faltan elementos para poder igualarle.
Y es que la ventaja fundamental del consumo frecuente de los aceites de oliva es que, además de optimizar tu salud y bienestar, le das un mejor sabor a tus comidas de modo que lo sano también sea delicioso.
Esto se logra con el aceite cornicabra, que por supuesto te recomendamos incluir en tu dieta diaria, para que no solo tu paladar se sienta satisfecho, sino que tu bienestar corporal se encuentre asegurado a raíz de su consumo.